El virus afecta a cada persona de forma diferente. Este ataca a la disposición genética directamente, provocando malformaciones, necrosis y mutaciones.
La clasificación principal se divide entre zombies y mutantes. Los zombies, mucho menos peligrosos, vagan por el mundo sin más motivación que la de alimentarse, buscando su propia supervivencia y evolución. Los mutantes, en cambio, debido al virus han adquirido consciencia y habilidades diferentes debido a la gran carga vírica. Son escasos, pero solo los Holders más experimentados tienen oportunidad de sobrevivir contra ellos.